Powered By Blogger

domingo, 3 de julio de 2016

Sin motivo alguno

     Hoy es unos de esos días en que me apetece escribir, no escribir sin más o sin destinatario alguno, hoy me apetece escribirte a ti, escribirte cada sentimiento que ronde mi cabeza, cada recuerdo, aunque son pocos, pero me basta una mirada, una sonrisa o una palabra tuya para escribir un diario en el cual tu eres el protagonista. Ahora mismo solo son los recuerdos encendidos de hace casi un mes, cuando el éxtasis inundaban las calles, cuando la luna y los luceros del oscuro cielo iluminaban tu juncal escultura, tus brillantes y profundos ojos, tu dorado cabello con dirección al cielo. Sí, tú eres mi inspiración en este largo mes, cada semana, cada día, cada hora, minuto y segundo, tú haces aflorar mis sentimientos, los cuales reflejo en mis versos. Solo quedan cuatro largas estaciones para volver a verte, pero no importa porque se que tú estarás allí.


15 de mayo de 2014

Recuerdos que hacen daño.

       Muchas veces he querido parar, no seguir adelante, dejarme llevar por los miedos y por "el que dirán", no luchar por mis metas y por lo más valioso que he tenido. Cuando empecé a levantar cabeza apareciste tú, manipuladora y arrasas todo haya por donde vas, sin pararte a pensar el daño que causas a los demás, me devuelves lo que quiero, pero me quitas lo que más deseo.
      ¿Por qué eres tan dura vida? estaba ya rozando el cielo con las puntas de los dedos y tú como de un plumazo me lo quitas todo y lo peor es que no los volveré a ver más, su vida ya terminó aquí y con ella las memorias de una vida llena de alegría, no será jamás lo de antes sin vosotros. Cuando era pequeña y me abrazabais y me besabais, ahí estabais vosotros a nuestro lado siempre.
       Ahora toca cambiar toda esta historia y empezar a versar otra nueva, pero sin vosotros en ella. Pueden pasar años, sin embargo siempre os tendré presente allá donde vaya, como una llama viva de fuego en mi pecho.

Delirios de una semana mágica

Cuando cada noche veo la luna con su traje de argentina, cuando procesión tras procesión la veo crecer y me quedo cautivada con su resplandor, simplemente pienso en que junto a ella crecen mis sentimientos hacia ti, paso tras paso, mirada tras mirada, ruego tras ruego... Esta semana está pasando cual estrella fugaz en la noche, pero lleno de pasión, respeto, emoción, alegría, impaciencia y sobretodo mucho cariño y amor. Ojalá y esta semana no hubiera sido tan corta y me hubiera dejado el tiempo suficiente para disfrutarte a cada momento. Cuando te veo con tu traje marchando junto a tu banda no puedo evitar dirigirte la mirada, que el corazón se me acelere cuando pasas por mi lado y me quedarme impregnada de tu aroma. Simplemente estos momentos tan intensos y bellos son los que me dan la vida.


2 de abril de 2015

"Frases llI"

Me consumo al pensar en cómo y dónde estarás y me asfixio cuando pienso en lo que pudo ser y nunca será, en cambio cuando te miro todo cobra sentido, y si vale la pena es por ti…

"Frases II"

Sé que me quieres. Cerca, pero no a tu lado. Feliz, pero contigo. Sola, pero de vez en cuando contigo. Porque tu amor es así: egoísta.

Hojas en blanco

Ojalá mi sueño se hiciera realidad, que los que solo reside en mis pensamientos pasara a la vida real, sentir y no imaginar tu aliento en mi cuello, tus caricias, tus abrazos y tus besos, que todo esto, el día menos esperado, se cumpliera.
No quiero conformarme con soñar despierta, con lanzar suspiros cuando paso por tu calle, cuando paso por algun lugar en el que hemos estado; no quiero satisfacerme con recordar cada momento que hemos pasado juntos, viviendo aventuras y alguna que otra travesura, con escribir tu nombre en los empañados cristales de mi habitación, con dedicarte poemas, con ver fotos de antaño en que aparecíamos junto con nuestros amigos de siempre.
No quiero vivir en el pasado, quiero nuestro presente y futuro, juntos, celebrando nuestros primeros momentos que vayamos viviendo, quiero completar las hojas en blanco que dejé en mi diario hace años.

"Frases I"

Y así, mirada tras mirada, despedida tras despedida, parecía que queríamos parar el tiempo y controlarlo a nuestro antojo.